El mundo, con una población de 8 mil millones de personas según la ONU, se enfrenta a desafíos apremiantes relacionados con el cambio climático. Sin embargo, a pesar de los problemas, existen razones concretas para mantener la esperanza, ya que tanto la comunidad científica como la acción política están dando pasos importantes para abordar estas cuestiones ambientales.
Un acuerdo global para la justicia climática
En la reciente COP27, la conferencia mundial sobre el clima, se logró un acuerdo histórico que reconoce la responsabilidad de los países desarrollados al financiar iniciativas de adaptación y mitigación en países en desarrollo. La “ciencia de la atribución” respalda la relación entre eventos climáticos extremos y el cambio climático global. Por ejemplo, cuando Pakistán sufrió este verano unas inundaciones mortales y catastróficas, las investigaciones demostraron que las inundaciones se habían visto agravadas por el cambio climático. Aunque Pakistán contribuyó con menos del 1% de las emisiones de carbono del mundo que propiciaron el desastre, el país tuvo que pagar miles de millones en daños.
Conservación marina
Las zonas marinas protegidas son áreas del océano donde se restringe la actividad humana para preservar la biodiversidad marina y los ecosistemas. Estas áreas no solo benefician a la vida marina, sino que también tienen impactos positivos en las personas. Por ejemplo, el Monumento Nacional Marino de Papahānaumokuākea en Hawái no solo protege la vida marina dentro de sus límites, sino que también ayuda a que florezca la vida marina que vive fuera de sus fronteras.
EE. UU. Y una inversión histórica en energía limpia
La Ley de Reducción de la Inflación (IRA), firmada en agosto, asignó una inversión sin precedentes de 369 000 millones de dólares en proyectos de energía limpia y eficiencia energética en EE. UU. Esto allana el camino para una transición más rápida hacia fuentes de energía renovable y establece un impuesto al metano, un potente gas de efecto invernadero.
Tecnología innovadora para afrontar el cambio climático
Utilizando la tecnología CRISPR, los científicos están mejorando la fotosíntesis y la capacidad de las plantas para capturar carbono de la atmósfera de manera más efectiva. Además, la investigación está explorando la posibilidad de cultivar alimentos sin necesidad de fotosíntesis, lo que podría revolucionar la producción de alimentos sostenibles. También se están desarrollando invernaderos submarinos experimentales para conservar agua y energía en la agricultura.
Combatiendo la contaminación plástica
En marzo, la ONU acordó negociar un tratado global para reducir el flujo de plásticos, imponiendo obligaciones legales a los países para abordar la contaminación por plástico. California también ha aprobado una legislación que tiene como objetivo reducir drásticamente el uso de productos plásticos de un solo uso en la próxima década.
Protección y restauración de la naturaleza
En los arrecifes de coral tropicales de Hawái, la naturaleza está encontrando una forma de adaptarse al cambio climático. Mientras tanto, los seres humanos están colaborando con la naturaleza a través del movimiento de rewilding (o retorno a lo salvaje). Escocia lidera esfuerzos para restaurar bosques perdidos, mientras que en California y Luisiana se permiten cambios naturales para corregir el rumbo de los ecosistemas.
En un mundo con desafíos ambientales apremiantes, los avances científicos y políticos ofrecen esperanza para una coexistencia sostenible con la naturaleza y la preservación del planeta. Estos logros ratifican la lucha de organizaciones ambientalistas como Greenpeace y demuestran que es posible tomar medidas audaces y sostenibles para enfrentar los desafíos ambientales globales.
