Coca Cola, Nestlé y Pepsico: los grandes responsables de la contaminación plástica en Latinoamérica
Las gigantes empresas de bienes de consumo de alta rotación, como Coca Cola, Nestlé y Pépsico, son las grandes controladoras de la producción de plástico en Latinoamérica y en el mundo y, con ello, se han convertido en las grandes responsables de la contaminación plástica de toda la región. No solo amenazan al clima global, sino que perjudican a las comunidades y a los ecosistemas que las rodean.
En este artículo analizaremos el comportamiento de estas empresas en detalle.
La contaminación plástica avanza sobre Latinoamérica
Más del 99% del plástico es fabricado utilizando combustibles fósiles, por lo que en cada etapa del ciclo de vida de este material (la extracción del gas y el petróleo para fabricarlo, el refinado y la producción, su incineración y llegada a rellenos sanitarios e incluso el proceso de reciclado) se generan gases de efecto invernadero; de acuerdo con estudios realizados por el Center for International Environmental Law.
Este mismo Centro fue quien advirtió en el año 2019 que la extracción, transportación y refinado del petróleo para la producción de plástico es responsable por las emisiones de aproximadamente 108 millones de toneladas métricas de dióxido de carbono a nivel mundial.
No obstante, según informes de Greenpeace, a pesar de estos impactos en el clima y la creciente contaminación producto de los plásticos, se predice que la producción global y el consumo de dicho material continuará incrementando dramáticamente, como lo ha hecho desde los años 50 hasta la actualidad.
De acuerdo con el organismo de comercio Plastics Europe, en el año 2020 la producción mundial de plástico alcanza los 367 millones de toneladas métricas, a comparación de los 359 millones de toneladas producidas en el año 2018. Si esto continúa, referentes de la industria predicen que el número debería duplicarse para el periodo 2030-2035 y triplicar para el 2050.
¿Por qué son tan contaminantes los productos elaborados con plásticos?
Los problemas ambientales asociados al plástico se derivan principalmente de dos factores: su lenta descomposición y su composición química. Según datos proporcionados por la Fundación Aquae, se puede ejemplificar de la siguiente manera:
- Una bolsa de plástico de las que utilizamos para nuestras compras requiere 150 años para degradarse por completo.
- Una botella plástica común, como la de Coca Cola que encontramos en los supermercados, puede tardar más de 1.000 años en descomponerse por completo.
Imagina tener que convivir con estos materiales en tu hogar durante todo ese tiempo. Claramente, sería imposible, y, sin embargo, muchas especies marinas en nuestro planeta se ven atrapadas en esta situación. La razón principal es que la producción de plástico no cesa:
- Aproximadamente se fabrican más de 100 millones de toneladas de este material cada año, lo que significa que la contaminación plástica en el medio ambiente no hace más que aumentar.
- De esas 100 millones de toneladas, 13 millones terminan en los océanos. Lo más preocupante es que, en el mar, no existen fronteras, lo que significa que estos desechos plásticos pueden terminar varados en cualquier parte del mundo.
¿Quiénes son los grandes responsables de la contaminación plástica?
De acuerdo con Greenpeace, los cinco principales productores de polímeros de plástico de un solo uso(entre ellos las empresas petroleras Exxon, Shell, Saudi Aramco, Formosa y Borealis) planean incrementar su capacidad de emisión en un 30% (70 millones de toneladas métricas adicionales) para el 2025. Las áreas claves para la expansión parecen estar en India, Norteamérica, el medio Oriente, China y el Sudeste Asiático.
Sin embargo, a nivel regional, las empresas como Coca Cola, Nestlé y Pepsico no se quedan atrás. Junto a otros grandes de la industria, como Danone, Unilever, Colgate Palmolive, Procter & Gamble, y Mars; juegan un papel preponderante en el control de la demanda de plásticos.
Tan solo Coca Cola colocó en el mercado 112 mil millones de botellas de plástico de un solo uso en el año 2020; esto a pesar de los compromisos de alto nivel realizados por estas marcas para enfrentar la contaminación plástica en respuesta a la creciente presión pública, las leyes y los grupos activistas.
¿Qué propone Greenpeace para frenar este problema?
Ante este panorama, Greenpeace busca ejercer presión política y evidenciar la falta de transparencia de estas empresas en cuanto a las emisiones de plásticos reportadas y su incapacidad de reducir de manera significativa la utilización de empaques con este material para distribuir sus productos.
Asimismo, les exige que dejen de aportar condiciones para que el cambio climático y la crisis ambiental siga avanzando. Las invita a que eliminen de forma gradual los plásticos de un solo uso y revisen la posibilidad de una transición hacia sistemas de reutilización(como es el caso de las botellas retornables o los envases rellenables) y productos libres de empaque(como aquellos en presentaciones sólidas como el shampoo en barra). Solo de esta manera se podrá avanzar para combatir la contaminación plástica de una vez por todas.