Un análisis del impacto y la participación activa de Greenpeace Argentina en la gestión y combate de los incendios forestales provocados en la Patagonia argentina
Los recurrentes incendios forestales provocados en la Patagonia argentina despiertan la alarma de todos los grupos activistas, y Greenpeace Argentina no es excepción.
En el marco de una nueva campaña para votar por los bosques, distintos voluntarios y activistas desplegaron un cartel de 20 metros de largo que colgaron en el puente que cruza el arroyo La Angostura, uniendo los lagos Nahuel Huapi y Moreno, con un mensaje escrito que resonó fuerte en todos los medios como un grito de desesperación: los bosques necesitan ser protegidos de manera urgente.
En este artículo abordaremos esta problemática en detalle.
¿Qué encontrarás en este artículo?
1. Introducción
2.Greenpeace alerta sobre los incendios forestales en la Patagonia argentina
3. ¿Qué sugiere Greenpeace para evitar que los incendios se propaguen por toda la Patagonia?
4. ¿Por qué son tan importantes los bosques andinos-patagónicos?
5. Conclusión
Greenpeace alerta sobre los incendios forestales en la Patagonia argentina
La nueva acción de alerta lanzada por la institución tras los reiterados incendios forestales que se suceden cada año en la Patagonia argentina, busca proteger a los bosques andinos patagónicos que se encuentran en peligro. Tanto es así, que en la última década el fuego ha arrasado 80.000 hectáreas, una superficie similar a casi 4 veces la ciudad de Buenos Aires.
Hernán Giardini, coordinador de la campaña de Bosques, explicó que la zona se encuentra cada vez más amenazada por los incendios provocados por la actividad humana, ya sea por pura negligencia o, la hipótesis más acertada, por sus intereses económicos.
Según los organismos oficiales, detrás de este fuego arrasador se estima que el 95% son responsabilidad pura y exclusivamente de la mano del hombre. Entre las causas más comunes están las fogatas y colillas de cigarrillos mal apagadas, que son provocadas o arrojados en épocas de sequía extrema, el abandono de tierras propensas para negocios inmobiliarios, y la preparación de áreas de pastoreo con fuego. Es decir, todas circunstancias que podrían evitarse y que eliminan la amenaza constante de pérdida de esta fuente natural de energía para la región y el mundo.
Como se sabe, una vez provocadas las llamas, las mismas comienzan a propagarse y los factores climáticos—como la falta de precipitaciones, las temperaturas elevadas, el bajo porcentaje de humedad, las heladas constantes y los vientos fuertes—hacen de la suya e inciden en su proliferación.
¿Qué sugiere Greenpeace para evitar que los incendios se propaguen por toda la Patagonia?
El mensaje es claro y contundente: si queremos dejar de engrosar las hectáreas de bosques perdidos(78.028 hectáreas Neuquén, Río Negro, Chubut y Tierra del Fuego en la última década para ser exactos, según datos del Ministerio de Ambiente de la Nación) el tiempo para actuar es ahora. Sobre todo sí, año tras año, la situación se agrava con la crisis climática, la sequía y las plantaciones de pino.
Es por estas razones, y por la urgencia de la situación, que Giardini sostiene que la solución es prepararse para escenarios cada vez más complejos, previniendo, pero también castigando a los responsables de todas estas malas prácticas. Al mismo tiempo, considera que los gobiernos provinciales deben aumentar la cantidad de brigadistas y guardaparques para proteger los bosques, mejorar sus condiciones laborales y transformar la infraestructura para controlar y combatir los incendios. Asimismo, asegurar la regeneración de los bosques arrasados por el fuego.
Por último, el coordinador de la campaña de Bosques, invita a la ciudadanía a que opine y se exprese sobre qué medidas deberían tomarse con quienes son los responsables de este ecocidio.
¿Por qué son tan importantes los bosques andinos-patagónicos?
Los bosques tienen un doble papel crucial en el contexto del cambio climático. Por un lado, pueden contribuir significativamente a reducir la vulnerabilidad de los ecosistemas y aumentar su resiliencia, lo que los convierte en aliados fundamentales para la adaptación a la crisis climática. Por otro lado, desempeñan un papel esencial en la mitigación de este fenómeno cuando se reconoce su capacidad para almacenar carbono y capturar gases de efecto invernadero. Es esencial considerar y reconocer esta doble función de los bosques al definir estrategias de conservación y manejo sostenible de estos recursos naturales.
Sin embargo, no se tiene en cuenta la importancia que tienen para el planeta. Es crucial actuar con urgencia, especialmente ante las proyecciones de un aumento futuro de la temperatura global de 2-4 °C. Este escenario plantea riesgos significativos para la existencia misma de los bosques, así como para su papel y potencial tanto en la adaptación como en la mitigación del cambio climático.
A pesar del papel clave para la protección de las futuras generaciones, los esfuerzos globales para abordar el cambio climático a menudo separan la adaptación y la mitigación, sin una articulación adecuada con el contexto de los países andinos. Esto se refleja en inversiones dispersas y en estrategias que tienden a centrarse en los bosques de tierras bajas.
Conclusiones
Además de los desafíos asociados con el cambio climático, los impactos de la intervención humana en los países andinos han influido significativamente en la velocidad de deforestación y degradación de los bosques. A nivel global, Greenpeace destaca tanto la importancia de preservar los bosques nativos como las dificultades para encontrar un equilibrio entre la conservación y el uso sostenible de estos recursos a través del manejo forestal sostenible y la restauración de ecosistemas.
Los bosques andinos, al proporcionar una amplia gama de bienes y servicios ecosistémicos, desempeñan un papel fundamental en la regulación climática, el suministro de agua, la mitigación de inundaciones y sequías, la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y la conservación de la biodiversidad. A pesar de su importancia, existe una falta de información en comparación con otros ecosistemas forestales, en parte debido a la complejidad de estos entornos y a los diversos incendios forestales a los que están sujetos.
